El sábado concluyó en Italia la reunión del G7 sobre cultura de 2024. Entre los temas clave de la declaración final de los ministros se encuentran la recuperación en Ucrania, las oportunidades y los peligros que plantea la inteligencia artificial y la protección de la libertad de expresión.
La semana pasada, los ministros de cultura del G7 (de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, el Reino Unido y los Estados Unidos) se reunieron en Nápoles para discutir los desafíos en los campos de la cultura y la creatividad.
La libertad de expresión ocupó un lugar destacado en la agenda y los ministros expusieron su compromiso de proteger este principio fundamental en su declaración final.
“Fomentaremos y protegeremos la libertad de expresión, incluida la libertad de los artistas y periodistas de crear y expresar sus opiniones sin interferencias, así como la pluralidad, independencia y sostenibilidad de los medios de comunicación”, se lee en el documento de ocho páginas.
Esto incluye, continúa la declaración, fomentar “el respeto por las opiniones disidentes en el debate democrático” y “contrarrestar cualquier intento de censurar, marginar o borrar las opiniones y expresiones culturales”.
En medio de la actual destrucción cultural en Ucrania, los ministros también se comprometieron a ayudar a Ucrania a reparar el Daño a su patrimonio cultural causada por la invasión de Rusia.
“Condenamos firmemente la agresión a gran escala de Rusia contra Ucrania y la destrucción generalizada de sitios históricos e instituciones culturales”, dijeron, destacando los daños a “museos, teatros, bibliotecas, archivos, iglesias y otros lugares de culto, amenazando Identidad cultural ucraniana“.
Ante esta destrucción, los ministros se comprometieron a “permanecer unidos en la defensa y promoción de la resiliencia y la regeneración de la cultura y el patrimonio cultural ucraniano, tangible e intangible”.
Los líderes acordaron además trabajar juntos para abordar las implicaciones éticas, legales, económicas y sociales de Inteligencia artificial para las industrias culturales y creativas.
“Intercambiaremos ideas sobre enfoques de políticas relacionadas con el desarrollo y la implementación de IA de una manera segura, protegida y confiable y sobre la mejora del panorama regulatorio y los enfoques de gobernanza para promover el valor social y económico de la creatividad y el trabajo humanos”, dijeron.
Además de la declaración final, un documento adicional se centró en la cultura como motor clave del desarrollo sostenible en África.
“Fomentaremos el intercambio recíproco de conocimientos (…) para apoyar los esfuerzos destinados a impulsar los sectores e industrias culturales y creativos; proteger los bienes culturales del tráfico ilícito; promover, salvaguardar y gestionar de forma sostenible el patrimonio cultural y aumentar la presencia de África en el mundo”. UNESCO listas del patrimonio tangible e intangible”, se comprometieron los ministros de cultura del G7, junto con otras partes interesadas.
La UNESCO, el brazo educativo, científico y cultural de las Naciones Unidas, elogió las promesas de los líderes.
“La adopción de la Declaración del G7 es un claro compromiso de los líderes mundiales con la cultura. Los derechos culturales deben protegerse, afirmarse y promoverse al más alto nivel de las políticas y la toma de decisiones”, afirmó Ernesto Ottone R., Subdirector General de Cultura de la UNESCO.
Lea la declaración completa aquí.