“Wake Up, Wake Up” es el coro de la música de sabor de Felix que Jeny BSGcoreografiado para la campaña Dance4Refugees en Instagram y en el lugar de artes de Bozar en Bruselas.
También es el llamado a la acción para las personas de todas partes para hablar y mostrar su apoyo a los refugiados.
“Todos necesitan despertarse. Es hora de hablar de eso, es hora de ayudar, es hora de reaccionar. No podemos permanecer en silencio, tenemos que hablar por los oprimidos y eso es lo que estoy haciendo”, dijo a Euronews.
La campaña de redes sociales desafía a las personas a publicar sus versiones de la coreografía en Instagram y donar fondos. Está dirigido principalmente a los jóvenes con quienes Jeny trabaja en su escuela de baile y cuando viaja al extranjero.
“Trato de comunicarme con la generación más joven porque para mí son el cambio, pueden marcar la diferencia en este mundo. El baile fue, para mí, una excelente manera de llamar la atención y cambiar la narrativa, celebrar la fuerza, el potencial y la resistencia de los refugiados”, dijo Jeny.
Un “legado” del conflicto de la RDC
El bailarín y coreógrafo nació en Bélgica, donde su familia buscó refugio del conflicto de décadas en la República Democrática del Congo (RDC). Un fondo que dejó su huella en la artista y la llevó al activismo en colaboración con el Alto Comisionado de la ONU para los refugiados (ACNUR).
“Mi familia huyó de la violencia en la década de 1990. Mis hermanos mayores pasaron tiempo en un campo de refugiados. Mi madre y mi padre han experimentado desplazamiento, violencia, miedo, lucha”, recuerda.
Más de 6.9 millones de personas son desplazadas internamente en toda la RDCcon un millón adicional de refugiados y solicitantes de asilo en los países vecinos, según el ACNUR.
Este “legado” trajo responsabilidades autoimpuestas adicionales para Jeny, quien se propuso la tarea de “no fallar” y ser una voz para la diáspora congoleña: “Hoy soy una prueba viviente de que el origen de los refugiados no define los límites de los refugiados, sino más bien sus fortalezas”.
“No son números, sino vidas que importan”
Jeny usa su plataforma para promover voces marginadas, habiendo fundado el Afrohousebelgiumuna escuela de baile con sede en Bruselas. También ha estado trabajando con el ACNUR desde el año pasado para amplificar las historias de los forzados a huir.
“El baile es universal y la causa de los refugiados hoy también es universal. Sabemos que los refugiados provienen de todo el mundo: Ucrania, Afganistán, Siria, la RDC y otros países. Pero no son solo estadísticas o números. Sus vidas importan y son como nosotros”, dice.
La ONU dice que actualmente hay 123 millones de personas desplazadas por la fuerza. En todo el mundo, hace dos veces más de una década. Casi 37 millones de ellos son refugiados. La organización advierte que los recientes recortes drásticos en la financiación de la ayuda humanitaria están poniendo en riesgo sus vidas.
La financiación para la agencia ahora está aproximadamente al mismo nivel que hace una década, dijo Filippo Grandi, Alto Comisionado de los Refugiados de la ONU, en el lanzamiento de la anual Informe de tendencias globales el 12 de junio.
“Estamos viviendo en un momento de intensa volatilidad en las relaciones internacionales, con una guerra moderna creando un paisaje frágil y desgarrador marcado por un sufrimiento humano agudo”, destacó Grandi.
El informe encontró que, al contrario de las percepciones generalizadas en las regiones más ricas, el 67 por ciento de los refugiados permanecen en los países vecinos, con países de bajos y medianos ingresos que acogen el 73 por ciento de los refugiados del mundo.