El artista de Northampton, de 29 años, y su coacusado, Alex Blake-Walker, enfrentan tres cargos conjuntos de violación y un cargo de agresión sexual.
El rapero británico nominado al Grammy Slowthai, cuyo nombre real es Tyron Frampton, ha sido acusado de violar a dos mujeres con su coacusado Alex Blake-Walker, después de una actuación en The Bullingdon en Oxford en septiembre de 2021, según escuchó un tribunal.
Ambos hombres niegan todos los cargos y dicen que toda actividad sexual fue consensual.
Frampton compareció ante el Oxford Crown Court acompañado de su esposa, la cantante pop Anne-Marie, con quien se casó en secreto en julio de 2022.
Al abrir el caso para la fiscalía, la abogada Heather Stangoe alegó que Frampton y Blake-Walker conocieron a un grupo de mujeres antes del espectáculo y les ofrecieron a algunas de ellas entradas VIP para el concierto. Uno de los denunciantes fue descrito como un “gran admirador”.
Luego del espectáculo, el grupo regresó a una de sus casas, donde ocurrió la presunta agresión. Se le dijo al jurado que Frampton había establecido dos reglas para la visita: “sin teléfonos y sin niños”.
“No les importaba si los sujetos de su atención daban su consentimiento o no. Dio la casualidad de que las dos mujeres en este caso no lo hicieron, pero eso no les importó a estos dos acusados”, dijo Stangoe al tribunal.
En la casa, dos de las mujeres supuestamente fueron “aisladas” de sus amigos y luego violadas y agredidas sexualmente por Frampton y Blake-Walker, quienes supuestamente “chocaron los cinco, discutieron sobre ‘equipos’ y contemplaron intercambiar a las chicas”.
Se dice que la agresión terminó cuando una amiga de las mujeres descubrió lo que estaba sucediendo. Según Stangoe, Frampton luego huyó de la casa saltando desde un techo estilo balcón.
Patrick Gibbs KC, defendiendo a Frampton, dijo al jurado que, si bien fueron “poco valientes”, los acontecimientos de esa noche entre su cliente y uno de sus denunciantes fueron consensuados.
Instó al jurado a “mantener la mente abierta” durante todo el juicio y afirmó: “Lo que está en disputa es si las mujeres dieron su consentimiento”.
Sheryl Nwosu, en representación de Blake-Walker, afirmó que su cliente negó haber obligado a una de las mujeres a tener relaciones sexuales y afirmó que “todo contacto y acto sexual fue consensual”.
El juicio está en curso.