Después de un complicado proceso legal de ida y vuelta, Spotify ganó el caso a pesar de que un tribunal determinó que había estado transmitiendo las canciones de Eminem sin licencia.
Spotify ha ganado un caso judicial de cinco años contra el rapero eminem sobre si la plataforma de música había estado transmitiendo su música sin licencia.
Eminem demandado Spotify en 2019, a través de su editor Eight Mile Style, acusando al transmisor de no licenciar correctamente su trabajo antes de ponerlo en la plataforma.
Spotify ganó el caso a pesar de que el tribunal consideró que Spotify no tenía licencia para transmitir las pistas involucradas en la demanda.
Si Spotify hubiera sido declarada culpable de la supuesta infracción de derechos de autor, no habría sido responsable de compensar directamente a Eminem. Sería Kobalt Music Group quien cobraría las regalías de Eminem en nombre de Eight Mile Style.
¿Por qué Eminem perdió este caso? La empresa del rapero presentó originalmente la demanda porque afirmaba que Spotify había fingido engañosamente tener las licencias de 243 de sus canciones.
Eight Mile Style alegó que, si bien estas pistas habían sido reproducidas miles de millones de veces, Spotify no había “pagado a Eight Mile por estas reproducciones, sino que había remitido pagos aleatorios de algún tipo, que solo pretenden representar una fracción de esas reproducciones”.
Según el editor, esto equivalía a una “infracción deliberada de los derechos de autor”. Cabe destacar que, en ese momento, el propio Eminem no estaba al tanto de la demanda y su música ha permanecido en la plataforma todo el tiempo.
Spotify respondió a la demanda en 2020 alegando que era completamente culpa de Kobalt Music Group y que, como empresa que administra los derechos de la música de Eminem, habían engañado a Spotify haciéndoles creer que tenían los derechos para transmitir al rapero.
En resumen, Spotify alegó que Kobalt había firmado un acuerdo con ellos para licenciar la música de Eminem sin que Kobalt tuviera realmente esos derechos de Eight Mile.
A partir de ese momento, el caso comenzó a ir y venir entre Eight Mile, Spotify y el recién acusado Kobalt. En un momento, todo se detuvo por si el CEO de Spotify Daniel Ek sería depuesto en el caso.
Finalmente todas las partes acordaron un juicio sumario para evitar un juicio con jurado.
El 15 de agosto de este año, finalmente, la juez Aleta A. Trauger dictó sentencia. Sin embargo, la conclusión no fue la que esperaba Eight Mile. En cambio, Trauger concluyó que la empresa había intentado deliberadamente sacarle a Spotify la mayor cantidad de dinero posible mediante la demanda por violación de derechos de autor.
Trauger descubrió que Eight Mile había otorgado a Kobalt la autoridad para cobrar sus regalías, pero no la autoridad para licenciar la música, que fue a parar a otra empresa. Como Eight Mile nunca informó a Spotify sobre esto, sugirió que no era una “víctima desafortunada” en un caso de infracción de derechos de autor.
En cambio, Eight Mile había creado una complicada red de propiedad y “era consciente de que el estado de la licencia de las composiciones había caído en la confusión y simplemente permitió que se violaran sus derechos de una manera que sería completamente inexplicable, salvo como una elección estratégica para fabricar daños por infracción”.
El tribunal aún consideró que Spotify había manejado mal los derechos de autor de Eminem, pero debido a la conducta de Eight Mile, no tenían derecho a recibir ninguna indemnización por daños y perjuicios.